Juan Miguel Antoñanzas Pérez-Egea, expresidente de Seat y del Instituto Nacional de Industria (INI), ha fallecido el 26 de marzo de 2023 a los 90 años. Antoñanzas nació en San Sebastián el 4 de octubre de 1932 y posteriormente se trasladó a vivir a Madrid.
Formación académica
Cursó el Bachillerato en el Colegio de Nuestra Señora del Pilar, institución en la que alcanzó las más altas calificaciones, con sobresaliente y premio extraordinario en el ejercicio de reválida.
Ingresó en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial de Madrid, donde obtuvo el título de ingeniero con el número uno de su promoción y posteriormente alcanzó el grado de doctor. Fue también premio nacional Fin de Carrera y recibió el Premio Manuel de Foronda al mejor expediente académico.
Trayectoria profesional
Durante su trayectoria profesional, que inició en 1958 en la empresa de automoción Barreiros, ocupó puestos clave en compañías como Seat, Chrysler, ITT, Marconi, Técnicas Reunidas o Uralita, entre otras. En 1975 fue nombrado presidente del INI, donde permaneció hasta principios de 1977, y fue presidente de la Asociación Española de Profesionales de Automoción (Asepa) desde octubre de 1998 hasta finales del 2006.
Distinciones
Juan Miguel Antoñanzas Pérez-Egea fue distinguido con la Gran Cruz al Mérito de España y la Gran Cruz del Estado de Mauritania. Estaba casado y tenía diez hijos.
Barreiros
Con relación a su experiencia al lado de Eduardo Barreiros, Juan Miguel Antoñanzas comentaba que «la clave de todo era la generosidad de Barreiros. Trabajar con Eduardo era como estar en una guerra. Queríamos conseguir una producción mayor. Estábamos muy bien pagados y sabíamos que nadie iba a detener nuestro crecimiento».
«Mi propia relación con Eduardo –recordaba él- era de afecto… Yo no he admirado a muchas personas, pero admiré a Barreiros, a pesar de los problemas y las disputas. Honestamente, nadie podría encontrar una universidad donde se pudiera aprender lo que se aprendía trabajando con Barreiros».
Ha sido maravillosa su colaboración no solo por su aportación tan decisiva en Barreiros Diésel, sino también a lo largo de los años posteriores colaborando con nuestra Fundación Eduardo Barreiros.
